Cada dos semanas, pues, “la
cocina debe ser objeto de una higienización especial: el techo emprolijado con
un plumero largo, los azulejos frotados con borra de café (sic) y enjuagados
con agua clara, o bien restregados con un trapo empapado en alcohol, los
quemadores de la cocina limpiados en una solución hirviente de agua y soda, el
horno liberado de grasas, para lo cual conviene dejarle adentro, la noche
anterior, un recipiente destapado con amoníaco”.
También quincenalmente hay que efectuar
una limpieza semejante en el cuarto de baño, empezando por el techo y llegando
hasta el último rincón, sin escatimar lejías y desinfectantes, lustrando
canillas y otros metales con polvos y dándoles brillo a espejos con querosén.
Otra labor a realizar bisemanalmente es el repaso y lustre de bronces, cobres y
platería, “con una mezcla de tiza y agua con la que se frota los objetos,
dejando secar y cepillando enérgicamente después”.
Mensualmente, corresponde pulir
vidrios, zócalos y puertas con agua jabonosa o partes iguales de agua y
alcohol; el rasqueteado con viruta de acero y luego encerado de pisos previo el
desempolve concienzudo de la biblioteca pasándole la aspiradora a cada uno de
los libros; el lavado de cortinajes de chintz o cretona, que se sumergirán en
agua jabonosa sin restregar, se enjuagarán y luego se dejarán diez minutos en
una solución de sal para fijar el color.
Una tarea fundamental que se
suele esquivar durante demasiado tiempo y debe hacerse todos los santos meses
es el arreglo a fondo de placares. Según Mucho Gusto, hay que vaciarlos,
limpiarlos con aspiradora, pasar un trapo húmedo por el interior, si hace falta
cambiar forros de estantes y cajones y reordenar perfectamente su contenido. Si
procedemos regularmente de este modo, nuestra conciencia de amas de casa estará
en paz, rebosando la satisfacción del deber cumplido. Anotemos entonces en una
agenda o en el almanaque los días de cada una de estas labores que mantendrán
nuestro hogar impecable sin mayor esfuerzo, provocando la sana envidia de
amigas, parientas y vecinas.